Y LE SIGUIÓ POR EL CAMINO
Y le siguió por el camino Marcos 10,46-52 En aquel tiempo, 46 al salir Jesús de Jericó con sus discípulos y bastante gente, el ciego Bartimeo (el hijo de Timeo) estaba sentado al borde del camino pidiendo limosna. 47 Al oír que era Jesús Nazareno, empezó a gritar: - Hijo de David, ten compasión de mí. 48 Muchos le regañaban para que se callara. Pero él gritaba más: - Hijo de David, ten compasión de mí. Estamos en la Cuarta semana de Resurreccion del Señor, y esta semana La Escuela de la Palabra nos proponía orar teniendo como clave: El Llamado de Dios y el Seguimiento. El Evangelio del día domingo nos hablaba del Buen Pastor, y me encantaba oirle a Jesus decirnos: “Mis ovejas escuchan mi voz y yo las conozco. Ellas me siguen y Yo les doy vida eterna. Nunca perecerán y nadie las arrebatará jamás de mi mano” Juan 10,27-28. Que grande es reconocer que por su Resurrección y por la fe nosotros somos suyos, y tenemos capacidad para escucharle, ha puesto en nosotros su Espíritu que nos hace...